Un
ambiente frío adornó el esperado duelo entre los punteros
del campeonato de la Segunda División. Día opaco, un
público que tardó en meterse al match auguraban una tarde de
fútbol calculado y previsible. Si bien el encuentro empezó
equilibrado, los dos mostrando sus armas y desarrollando un
interesante juego ofensivo, bien pronto las circunstancias se
pondrían en contra de La Peña Sporting: Oliva se lesionó y
con ello el cuadro visitante no pudo soslayar más los
problemas que empezó a tener por el buen juego de Barrena
provocando que tanto Gino Pérez y Juan Luna se aproximaran al
arco de Laurie. Sucede que Penalillo suplió correctamente al
buen Oliva, pero el hecho de tener que acoplarse rápidamente
a Almanza en la última línea implicó que toda la gestión
defensiva sufriera. Y de ello tomó partido el rival, tratando
de llegar por la posición de Gino Pérez, quien le trajo
muchos problemas a Almanza y pudo superar más de una vez el
cierre de Pereira. El local también buscó el centro a Luna,
fórmula que dio resultado para el primer gol del alto
jugador. Por el lado de La Peña Sporting, Barranzuela
recibió el balón de espaldas en dos oportunidades y giró
para sacar sendos centros shots, uno de ellos dilapidado por
Alegría. Con todo, La Peña Sporting terminó mejor el primer
tiempo gracias al trajín de Neuhauss y Mario González, ya
con Velásquez más conservador y presto para ayudar a la
defensa; y con el accionar de Vela, presente en donde se le
requería.
Ya
en el segundo tiempo estuvo claro que La Peña estaba
susceptible a recibir otro gol, pues el ingreso de Prado
podría ser una solución ofensiva, pero rompió el equilibrio
en medio campo. Barrena tuvo más espacios y también su
reemplazante Asencio. Así, el 2-0 no sorprendió a nadie,
pues ya Luna se las había visto en un mano a mano con Laurie
y la sensación general era que La Peña estaba con el equipo
demasiado largo.
Quedó
claro que es difícil reemplazar a J. Chávez y a Dolorier.
Sucede que los hombres que se acomodaron para paliar estas
ausencias suelen ser importantes recambios, pero empezar el
partido es otra historia. Además, la lesión de Oliva
sucedió en el partido menos indicado: contra un rival que
sabe ofender por bajo y alto, al comienzo del match y sin que
la improvisada línea defensiva pueda haber practicado una
circunstancia como ésta. Dicen que un equipo madura cuando
pierde el invicto. Estamos seguros que el profesor Drago
sabrá sobrellevar esta difícil circunstancia emocional del
plantel para encumbrar nuevamente a La Peña Sporting en la
lucha franca por el ascenso.
Mark
Gogny Fotos Jorge Pinedo |